Mario Benedetti


Mentre estava fent l’escrit anterior he sabut que Mario Benedetti ha mort a Montevideo. Benedetti va expressar sempre la coherència entre compromís col.lectiu i actituds vitals. Va ser una persona molt discreta, senzilla i inclaudicable en el combat per la vida, per l’esperança, per totes les llibertats. I va escriure-ho en les seves poesies. Poemes de vida quotidiana, on la nostàlgia i l’optimisme; la tristesa i l’alegria; la tendresa i la força, es creuaven a les cantonades de cada vers, com passa en la vida. En els seus haikus, Benedetti ens deia: “quién lo diría/ los débiles de veras/ nunca se rinden”; o també: “en los harapos/ suele haber más historia/ que en la etiqueta”. I sobretot: “¿romperse el alma?/ ojo, para las almas/ no hay accesorios”. Avui la mort de Mario Benedetti ens ha trencat l’ànima, però la seva vida serà un referent que creixerà en moltes altres vides. Feia dos anys havia mort Luz, la dona amb la que va compartir la vida durant 60 anys; és l’única tristesa que confessava insuperable, en una poesia sublim (Epílogo). Alhora, al bell mig de la seva tristesa, Benedetti era capaç de poetitzar el conflicte social en un sonet preciós (Lucha de clases). L’amor i la lluita; la tendresa com a matèria per fabricar els somnis... Gracias por todo, Mario.


Epílogo

Antes de su final inmerecido
Luz abrió por última vez sus ojos
y su mirada fue una despedida

nunca podré olvidar
esos ojos tan míos
resumiendo una vida
dando un amor postrero
más o menos consciente
del temblor de mis manos.

De ahora en adelante
aunque comparta el tiempo con cercanos
con los míos de siempre
y pregunte y responda y hasta ría
mi alma estará sola en su guarida
con su resignación involuntaria
rodeada de memorias imborrables
e insomnios invadidos de tristeza.

y así una noche llegaré en silencio
al borde de mi último destino.

Lucha de clases

Toda lucha de clases es un nido
de problemas nada superficiales,
sea en las cumbres o en los arrabales
en la memoria como en el olvido.

Siempre hay un sueño que es más atrevido
y también otros que son mas brutales,
el corazón enfrenta esos puñales
pero no se da nunca por vencido.

En la brega entre pillos y decentes
es bastante riesgoso ser sincero,
hay sádicos de mierda y bufones

y en esta pugna de sobrevivientes
hay buena gente que se aflige, pero
en la lucha de clases no hay perdones.